Cine debate: conmovió al público con Billy Elliot y abrió un espacio de reflexión sobre vocación y diversidad
Con una destacada participación del público y un fuerte componente emocional, la Federación de Entidades Profesionales Universitarias de Tucumán (FEPUT) llevó adelante el primer cine debate con la proyección de la película Billy Elliot (Quiero bailar). La actividad se realizó el viernes a las 20:00 en Crisóstomo Álvarez 545, con entrada libre y gratuita.
Más que una función de cine, la jornada se propuso como una muestra cultural con vocación transformadora. El film —ya considerado un clásico contemporáneo— fue el punto de partida para debatir sobre las presiones sociales, familiares y psicológicas que atraviesan las decisiones vocacionales, especialmente en contextos de prejuicio y desigualdad.
La mesa debate posterior estuvo coordinada por un equipo interdisciplinario compuesto por el psicólogo Francisco Messina (M.P. 4273), la psicóloga Anahí Rubio (M.P. 3180), la Profesora de danzas y coreógrafa, Fernanda Saravia y el bailarín y coreógrafo Alejandro Elías. Cada uno de ellos aportó su mirada desde la experiencia profesional y artística, enriqueciendo el análisis del film y su impacto.
Uno de los ejes más movilizantes del encuentro fue el tratamiento de la diversidad sexual y la construcción de la identidad en espacios tradicionalmente conservadores como el ballet. La película —estrenada en el año 2000— plantea con sensibilidad los obstáculos que enfrenta un niño que desea ser bailarín, y el debate permitió reflexionar sobre cómo esas barreras siguen vigentes, especialmente en regiones como el norte argentino.
El público se mostró conmovido y participativo, compartiendo experiencias e interrogantes sobre la vocación, el proyecto de vida, y las condiciones culturales que influyen en su desarrollo. El evento también visibilizó la realidad de quienes eligen disciplinas artísticas en contextos donde muchas veces no hay apoyos ni estructuras para sostener esas elecciones.
Con esta propuesta, FEPUT abre un valioso espacio de encuentro entre el arte, la psicología y la comunidad, apostando al diálogo como herramienta para construir una sociedad más libre y empática.
